#RetoDistópico


Con la llegada del nuevo año y porque mi obsesión no conoce límites, se me ha ocurrido lanzar un reto distópico en enero (en principio, si la cosa funciona se podría incluso alargar). La idea es leer una distopía (o verla) a lo largo del mes y poner en común vuestras impresiones sobre la misma. Por supuesto, os recomiendo empezar por mi top 5, aunque más abajo daré más opciones. Todo son sugerencias, podéis innovar cuánto queráis (¡pero no me vayáis a mezclar ciencia ficción o literatura post-apocalíptica!).

-Nosotros, de Yevgeni Zamiatin.
-1984, de George Orwell.
-Un mundo feliz, de Aldous Huxley.
-Fahrenheit 451, de Ray Bradbury.
-Espejismo, de Hugh Howey (en realidad es una trilogía).

De los cuales ya he hablado largo y tendido en anteriores ocasiones pero, si necesitáis que os refresque la memoria, tenéis mi lista de razones por las que deberíais leerlos aquí.

Entendiendo que muchos de vosotros ya las habréis leído (seguramente si os habéis planteado participar en este reto no seáis nuevos en este género), os dejo algunas sugerencias más a tener en cuenta:

-Battle Royale, de Koushun Takami. 

Battle Royale ocurre en una línea de tiempo alterna; según el prólogo del libro, Japón se ha convertido en un estado policial, conocido como la Gran República del Asia Oriental, abarcando ahora no solo el territorio de la isla, sino también lo que anteriormente se conocía como Korea y también poseyendo una gran influencia en el territorio chino. La novela relata la historia de una clase de un colegio elegida para participar en el "juego" llamado Battle Royale. Para controlar a la población, cada año escogen un grupo de alumnos al azar para que luchen a muerte. 42 estudiantes encerrados en una isla. Todo está permitido para ganar.  Tan sólo un estudiante puede sobrevivir.

Tenéis también una película y una serie manga basada en esta novela, por si preferís estos formatos.

- Hijos de hombres, de P.D. James

La capacidad reproductiva de la humanidad ha desaparecido súbitamente. Theo Faron vive en la Inglaterra post-Omega, un período deprimente en el que ya no hay futuro. Resignado, empieza a denunciar en su diario la sordidez de una sociedad en decadencia y el orden que pretende imponer su primo, el Guardián, el temible dictado r de Inglaterra. Todo cambia el día en que un grupo de jóvenes se propone deponer al tirano. Pero los revolucionarios sólo podrán triunfar con la ayuda de Theo.

Bajo mi punto de vista, bastante mejor la película.
 
-El fugitivo, de Stephen King.

A mediados del siglo XXI, un concurso televisivo cuyo principal atractivo es la muerte de los participantes bate récords de audiencia. Ben Richards, padre de una niña enferma y sumido en la más profunda miseria, decide concursar atraído por los extraordinarios premios, aun a sabiendas de que no sobrevivirá. Sometido a una i mplacable persecución, se plantea un único objetivo: resistir tantos días como sea posible para aumentar el premio y asegurar la subsistencia de su familia. Un aterrador futuro donde la televisión es la única realidad. 

La versión cinematográfica es de sobra conocida.

-La naranja mecánica, de Anthony Burgess. 

La naranja mecánica cuenta la historia del nadsat-adolescente Alex y sus tres drugos-amigos en un mundo de crueldad y destrucción. Alex tiene los principales atributos humanos: amor a la agresión, amor al lenguaje, amor a la belleza. Pero es joven y no ha entendido aún la verdadera importancia de la libertad, la que disfrut a de un modo violento. En cierto sentido vive en el edén, y sólo cuando cae (como en verdad le ocurre, desde una ventana) parece capaz de llegar a transformarse en un verdadero ser humano.

La película, dirigida por Stanley Kubrick, es un clásico. 

-Leyes de Mercado, de Richard Morgan.

En un futuro no demasiado lejano, en el año 2041, la tierra está gobernada por poderosas multinacionales. Pese a que todavía existen los gobiernos, estos no son más que títeres en manos de ejecutivos ambiciosos y agresivos. Tan agresivos que los contratos mercantiles ya no se disputan en una sala de reuniones.
En este futuro distópico, si un ejecutivo desea conseguir ese contrato, debe participar en una carrera donde todo vale, incluso matar al adversario. Los coches se han convertido en auténticas máquinas de matar.
Chris Faulkner, protagonista de esta historia, es uno de estos jóvenes ejecutivos. El detesta este modo de vida. No obstante, se ha labrado una gran reputación y gracias a ello es contratado por una de las multinacionales más poderosas. Su puesto de trabajo será en el departamento de inversión de conflictos.
A partir de ese momento, veremos el deterioro moral de Chris. Como, poco a poco, va descendiendo en una espiral de violencia, drogas y sexo, introduciéndose cada vez más en un mundo que odia pero a la vez le hace sentir poderoso.

-El Círculo, de Dave Eggers.

Cuando a una joven le ofrecen trabajar para El Círculo, la empresa de Internet más potente y prometedora del momento, no se lo puede creer. Siendo la base de la empresa un entorno joven, moderno y universitario, la joven descubrirá que no todo es tan reluciente (o privado!) como nos cuentan. Un relato sobre la vida, las nuevas tecnologías, una crítica a las redes sociales y a la carencia de privacidad.

 -Congreso de futurología, de Stanislaw Lem.

Tras un período de hibernación, Tichy es reanimado en el año 2039 y encuentra un mun do en el que impera la paz y reina un bienestar general; en esa sociedad controlada por la “psiquímica”, se aprende y se ama por medio de productos químicos, los sentimientos son manipulados y toda espontaneidad ha dejado de existir. Bajo una apariencia exterior de abundancia y de confort, Tichy descubre, sin embargo, una realidad sobrecogedora que supera a la más fantástica alucinación.

-Las torres del olvido, de George Tuner.

Este título nos lo propone @emenegro. Las gigantescas torres ruinosas y abandonadas que se elevan hacia el cielo en los aledaños de la Melbourne de un futuro lejano son el último testimonio de una civilización que se autodestruyó a mediados del siglo XXI. Un brillante hombre de teatro pretende reconstruir lo que pudo ser la vida humana en aquellos ya lejanos años de convulsiones sociales, trastornos climáticos, superpoblación, carestía e irremediables crisis. Al hacerlo descubrirá nuestro mundo y el de nuestros hijos, el mismo que los habitantes de estas primeras décadas del siglo XXI estamos destruyendo con una extraña mezcla de saña, codicia y estupidez. El círculo vicioso está hoy a punto de cerrarse: faltan sólo unos años.

-El talón de hierro, de Jack London.

Un chivatazo de @multimaniaco. Publicada en 1908, de esta novela dijo León Trotski que era "una brillante anticipación del fascismo". La novela describe un mundo en el que la división entre clases se ha agravado, creando una poderosa oligarquía que mantiene el poder a través del miedo. «El Talón de Hierro» es el nombre que le otorga el obrero revolucionario Ernest Everhard al gobierno que la Oligarquía industrial construye en el siglo XX. El Talón de Hierro crea un sistema social dentro del cual toman la cúspide, y para apoyarse, se rodean con los sindicatos claves (metalurgia, transportes, comunicaciones, etcétera). Estos sindicatos favorecidos se transforman en "obreros de primera clase", frente a los "obreros de segunda clase", que son los sindicatos de otras funciones. De esta manera dividen el movimiento sindical, y gobiernan sin contrapeso posible, ya que los sindicatos favorecidos, sabedores de que sus prebendas derivan de la Oligarquía que rige el Talón de Hierro, se convierte en afín a sus intereses.

-Ready Player One, de Ernest Cline

Me resistía a  meter este libro en la lista porque, aunque el escenario de fondo es absolutamente distópico, la acción se me antoja más como un videojuego que como una distopía al uso. Pero, dado que es uno de los mejores libros que me he leído y, me temo, ha pasado bastante desapercibido para el gran público, lo sumo a la lista con una recomendación muy personal: leedlo, insensatos.
La trama, prometedora: Es el año 2044 y el mundo es un desastre. Las fuentes de energía fósiles están prácticamente agotadas y el precio del combustible está por las nubes. En medio de una enorme depresión a nivel mundial la mayoría de la gente subsiste como puede. Sin embargo un videojuego de realidad virtual llamado OASIS proporciona la vía de escape que las personas necesitan. La gente dedica más tiempo al juego que a la vida real misma. El juego ofrece todas las posibilidades imaginables y cualquier cosa es posible. El creador de OASIS es un enorme fan de los años 80, así como un fantástico programador de videojuegos que amasa una inmensa fortuna con su compañía GSS, que tiene como obra maestra OASIS. Tras su muerte se anuncia en un vídeo que el juego contiene un Huevo de pascua. Quien lo encuentre heredará toda su fortuna. El tiempo pasa hasta que tras cinco largos años Wade Watts, quien decide como tantos otros lanzarse a la carrera para encontrar el Huevo de Pascua, de pronto logra resolver uno de los rompecabezas que le acerca más a su meta. La competición es encarnizada entre los sixers, los empleados de una empresa llamada IOI que pretende hacerse con el control de OASIS, y los gunters, todas las demás personas, sea individualmente o en clanes. Así comienza una carrera frenética en la que la única solución para sobrevivir es ganar.


Para los más jóvenes también hay opciones. Os propongo dos sagas juveniles:

-Los juegos del hambre, de Suzanne Collins.

Los juegos del hambre se desarrolla en un país llamado Panem, lo que es en realidad una civilización postapocalíptica ubicada en lo que antes era América del Norte. El territorio se comprende de El Capitolio, que es la central del país, y trece estados que están bajo su control, los cuales son llamados distritos. Hace cerca de 100 años, el Distrito 13 inició una rebelión ante El Capitolio, donde se perdieron una enorme cantidad de vidas, además de la destrucción total de dicho distrito. Como castigo para evitar otros futuros levantamientos, El Capitolio creó un evento llamado «Los Juegos del Hambre», en donde anualmente los doce distritos sobrantes deben enviar dos tributos, un chico y una chica con edades entre los doce y los dieciocho para que lucharan a muerte en una arena hasta que solamente quedara uno, mientras todo Panem los observa a través de televisión.

Disponible en versión película, cómo ya sabréis.

-Divergente, de Veronica Roth.

Una futurista ciudad de Chicago tiene la población dividida en facciones, grupos de personas con singulares valores culturales, religiones y conductas. Cuando los jóvenes cumplen dieciséis años deben asistir a una Prueba de Aptitud la cual determina a qué facción pertenece cada uno, eligiendo vivir en la otra facción o quedarse con sus padres.

También hay película de esta saga.

Y, porque no todo van a ser novelas, podéis optar por alguna de estas opciones:

-Akira, de Katsuhiro Otomo.

Este manga se desarrolla en un ficticio1988. El mundo está al borde de la destrucción absoluta. La tecnología avanzada fue la causa de una terrible explosión que desencadenó una guerra nuclear y devastó las grandes ciudades del planeta. Treinta años después, sobre las ruinas de Tokio, se alza la megalópolis de Neo-Tokio, una ciudad opresiva e inhumana cargada de problemas como el desempleo, la violencia, la droga y el terrorismo. Las sectas religiosas y los grupos extremistas, aprovechándose de la insatisfacción de los ciudadanos, cultivan el mito de Akira, un "niño cobaya" depositario de la "energía absoluta" cuya resurrección significaría para Japón el amanecer de una nueva era.

-V de Vendetta, de Alan Moore y David Lloyd.

La historia de esta novela gráfica está ambientada en Gran Bretaña durante un futuro cercano y tras una guerra nuclear parcial, con gran parte del mundo destruido. En este futuro, un partido fascista ostenta el poder en el Reino Unido. Un misterioso revolucionario apodado "V", oculto tras una máscara de Guy Fawkes, empieza una elaborada y violenta campaña con el fin de derrocar el gobierno e incitar a la población a adoptar un modelo político-social diferente.

Su versión cinematográfica es de sobra conocida también.

-Watchmen, de Alan Moore.

Me llega esta propuesta por parte de @Elexpecial. Watchmen presenta una historia alternativa donde los superhéroes surgen en los años 1940 y 1960, ayudando a los Estados Unidos para ganar la Guerra de Vietnam. El país se está desplazando hacia una guerra nuclear con la Unión Soviética, los vigilantes disfrazados han sido declarados ilegales y la mayoría de los superhéroes anteriores se encuentran en retiro o trabajan para el gobierno. La historia se centra en el desarrollo personal y de las luchas de los protagonistas como una investigación sobre el asesinato de un superhéroe patrocinado por el gobierno que los saca de su retiro, y, finalmente, les lleva a enfrentarse a un complot que evita la guerra nuclear matando a millones de personas.


O, si lo preferís, por una película. Tenéis las adaptaciones anteriormente mencionadas o estos otros títulos que os sugiero a continuación.

-Rompenieves.

Un fallido experimento para solucionar el problema del calentamiento global casi acabó destruyendo la vida sobre la Tierra. Los únicos supervivientes fueron los pasajeros del Snowpiercer, un tren que recorre el mundo impulsado por un motor de movimiento eterno.

Podéis escuchar el podcast que grabé en colaboración con La Biblioteca de Trantor aquí. Además, es la Adaptación de la novela gráfica "Le Trasperceneige", escrita por Jean-Marc Rochette y Jacques Loeb.

-Total Recall.

En el año 2084, la guerra química devasta la tierra. Hay poca tierra habitable restante y se divide en dos territorios - la Federación Unida Británica (FUB) y la Colonia (Australia). Muchos residentes de la Colonia viajan a la FUB para trabajar en sus fábricas a través de "la caída", un tren gravitacional, que viaja a través de la Tierra. Mientras una resistencia que opera en la FUB busca mejorar la vida en la colonia.
La historia se centra alrededor de un obrero llamado Douglas Quaid, quien, cansado de su trabajo sin futuro y la existencia mediocre, decide visitar Rekall, una empresa de entretenimiento virtual que implanta recuerdos artificiales.

La versión de 2012 (protagonizada por Colin Farrell) es una libre adaptación del relato de Phillip K.Dick "Podemos recordarlo todo por usted". Si bien el relato, a mi parecer, es ciencia ficción pura, esta versión sí que podría ser considerada una distopía, dados los cambios introducidos en ella.  Sea como sea, no dejéis de leer a Phillip K.Dick, un verdadero genio.

-Equilibrium.

Después de una Tercera Guerra Mundial, las emociones humanas han quedado proscritas gubernamentalmente como causa de la decadencia humana, éstas son controladas mediante una droga sintética conocida como 'prozium'. Todo aquel ciudadano que se niegue a mantener su consumo continuado y elija tener emociones libres es calificado como un ofensor de sentidos y castigado con la pena de muerte.
Para vigilar y detener a los ofensores sensoriales, el gobierno (un único patriarca llamado 'padre' y un consejo) ha designado una unidad conocida como el Tetragrammaton compuesta por los clérigos, guerreros entrenados desde su niñez en un arte marcial que combina las armas de fuego, el combate cuerpo a cuerpo y el kendō para vigilar y contener a la humanidad dentro de cada ser viviente en 'Libria'. Al frente de esta unidad, se encuentra el clérigo John Preston  cuyo compañero comienza a comportarse extrañamente después de evitar sus dosis de prozium: ha comenzado a sentir.

Tenéis este magnífico podcast de La Biblioteca de Trantor sobre esta película. Una verdadera lástima no haber podido participar porque es una película para comentar, sin duda.

-La isla.

A mediados del siglo XXI, Lincoln Seis-Echo y Jordan Dos-Delta  son dos de los miles de supervivientes de una supuesta catástrofe ecológica que extinguió a casi toda la humanidad. Viven en un búnker militar bajo tierra junto al resto de los supervivientes y con la esperanza de ser seleccionados para ir a "La isla", el único lugar del mundo que no fue contaminado. Pero la curiosidad de Lincoln lo llevará a descubrir un secreto que pondrá en peligro su vida y la del resto de sus compañeros. Lo único que puede hacer es junto a Jordan, intentar sobrevivir en un mundo nuevo, sabiendo que son perseguidos por una extraña organización que quiere verlos muertos.

-La fuga de Logan

Es el año 2274, una catástrofe ha diezmado la vida en la Tierra. Algunos supervivientes viven en una cúpula gigantesca construida por sus antepasados en las cercanías de la ex capital de Estados Unidos, que los mantiene aislados del mundo exterior. El mantenimiento de la vida está a cargo de computadoras, y los habitantes viven una vida dedicada al ocio y el placer. Para mantener estable el número de habitantes, la reproducción se realiza por clonación, pero la longevidad está limitada a los 30 años de vida. Llegada dicha edad, hay que someterse a una ceremonia semirreligiosa llamada el Carrusel, en la cual hay que lanzarse al vacío de un anfiteatro para desaparecer flotando en el aire entre las aclamaciones de los otros habitantes más jóvenes. En el Carrusel, existe la esperanza del Renacimiento, una creencia en que si un ciudadano ha obedecido las leyes, se reencarnará en un clon que le sustituye. Si alguien desobedece, por el contrario, se considera que "desaparecen para siempre".

-Elysium

En el año 2159, los seres humanos se dividen en dos grupos: los ricos, que viven en la estación espacial Elysium, y todos los demás, que sobreviven como pueden en una Tierra devastada y superpoblada. Rhodes, una dura gobernante, promueve una rígida ley antimigración, cuyo objetivo es preservar el lujoso estilo de vida de los ciudadanos de la estación espacial. A pesar de ello, los habitantes de la Tierra harán todo lo posible por emigrar a Elysium. Max acepta una misión casi utópica, pero que, si tuviera éxito, significaría la conquista de la igualdad entre las personas de esos dos mundos tan opuestos.

-In time

Ambientada en una sociedad futura. El hallazgo de una fórmula contra el envejecimiento trae consigo no sólo superpoblación, sino también la transformación del tiempo en moneda de cambio que permite sufragar tanto lujos como necesidades. Los ricos pueden vivir para siempre, pero los demás tendrán que negociar cada minuto de vida, y los pobres mueren jóvenes. Tras conseguir, por casualidad, una inmensa cantidad de tiempo, Will , un joven obrero, será perseguido por unos policías corruptos, "los guardianes del tiempo". En su huida, toma como rehén a una joven de familia adinerada.

Ya sea leyendo una novela, un cómic o viendo una película, podéis sumaros a este #RetoDistópico utilizando el hashtag en Twitter o publicando un comentario en este post, sólo tenéis que indicar qué título habéis escogido y, si queréis, vuestra crítica u opinión sobre el mismo. No tenéis más excusa para no participar que la falta de ganas ;) 

 

 

Oxígeno


No es ningún secreto que no me gustan los finales. Los nudos depende, porque pueden llegar a ahogar o mantenerte anclado al suelo. Eso es algo que aprendí cuando ya apenas me quedaba oxígeno. También descubrí que no siempre estás donde se ubican tus pies. Lo sé porque me he perdido más veces de las que me he encontrado. Quizás porque, ahora entiendo, nunca supe bien quién era. Para aceptar eso, primero tuve que desconocerme del todo. Y, después, reconstruirme. Aquello me enseñó que a veces está bien reconocer que tenemos miedo. Sobre todo porque es la única manera que conozco de perderlo. Los miedos al final no son más que inseguridades. Tememos lo que no entendemos, lo incierto, lo que no podemos controlar. De mis miedos aprendí que las certezas terminan por ser rutina y que, en realidad, lo único que controlamos son nuestras propias acciones. Que a veces basta con encender la luz para comprender que tus fantasmas no eran más que una corriente de aire. Que para perder el miedo a las alturas lo mejor es saltar en paracaídas. Y, que si no puedes deshacer el nudo, quizás lo más sencillo sea cortarlo. No, eso último lo aprendí cuando me empujaron de un avión en marcha. Y no, no es cierto que se pueda salir ilesa de una caída desde esa altura. Siempre quedarán rasguños. Que el tiempo puede que cure, aunque siempre deja huella. Pero una piel sin imperfecciones es una piel que no ha vivido. De mis sonrisas quedarán arrugas. Y de mis cicatrices lo que aprendí de cada herida. Porque casi todo lo que importa duele. Que no hay sonrisa que no pueda ser lágrima. Que sentir es tirarse al mar de cabeza, tan impredecible como es, tan salvaje. Que todo lo demás son bañeras. Y, al final, creo que el resumen de todo lo que aprendí es que, aunque no me gusten, los finales existen porque mi propia existencia está condenada a extinguirse. Que no tiene sentido temer lo inevitable porque, entre tanto temblor, al final lo que te toca es pelear. Sobrevivir. Sobreponerte. Y seguir como puedas, combatir la tempestad, tragar agua. Que tus pulmones te recuerden de vez en cuando que estás vivo.